jueves, 1 de marzo de 2012

BLAME IT ON THE BOOGIE

Domingo, 11:30 a.m. Todo el polideportivo Marqués de Samaranch está expectante. Por la megafonía suena a volumen brutal un estribillo inconfundible: “Don't blame it on the sunshine. Don't blame it on the moonlight. Don't blame it on good times. Blame it on the boogie. Don't you blame it on sunshine…”. Cinco evaristos con cara de circunstancias pero llenos de orgullo y dignidad se despojan del chándal ante la admiración de todos los presentes. Ya sabéis, lo típico. Las chicas suspiran, los chicos ponen de cara de “vaya güevos que tienen estos puretas”. A estas alturas de la segunda vuelta ya se nos conoce en el mundillo del basket municipal como los temerarios Jackson 5.
La árbitro pita un minuto. Charly (aparición salvadora de última hora) se despide con lágrimas en los ojos de Hugo, que queda en la banda en su carrito a cargo de Pau. El crío afronta con formidable entereza su primera experiencia evarística. Comienza el partido. ¿Qué queréis qué os cuente? Imponemos nuestro clásico ritmo de trote cochinero fruto de la experiencia que dan cientos de partidos sin cambios. Aún así empezamos jugando bastante bien. Aguantamos el primer tiempo jugando con alegría y nos vamos al descanso por delante. En el tercer cuarto se nos funden los plomos. Enchufan tres triples consecutivos y encajamos un parcial de escándalo que hace que se pongan por delante en el marcador. Intentos heroicos de remontada en el último cuarto, incluidos los clásicos uno contra cinco, pases de contraataque contra el muro, ristra de tiros libres fallados, etc., para terminar palmando dignamente por seis puntos. Alguien tendrá que estudiar algún día qué pasa por la cabeza de un evaristo en posesión de la pelota cuando un compañero le grita: “¡Tranquilo!”. Pero esa es otra historia.
Acabamos, una vez más, con la sensación del deber cumplido, con la admiración de nuestros rivales ante una entrega muy por encima de nuestras posibilidades y con Hugo con reflexionando sobre la importancia de la herencia genética en la vida de un ser humano. En resumen otra gran jornada. Por megafonía vuelve a sonar, a modo de homenaje, el mítico: “Don't blame it on the sunshine. Don't blame it on the moonlight. Don't blame it on good times. Blame it on the boogie. Don't you blame it on sunshine…”
Evaristos del mundo, próximo domingo, 09:00 a.m., Evaristos vs Sih. Confirma bro. Te necesitamos. Por cierto, ¿quién será Michael?

http://www.youtube.com/watch?v=vjW1iq4IO2k&feature=player_embedded

6 comentarios:

Alberto dijo...

Lo primero dar las gracias a los cinco valientes del domingo pasado -especialmente al cronista- por su compromiso evarístico y por mantener la moral alta cuando una larga y exigente temporada va pasando factura. Y es que es posible que en estos momentos, cuando acechan las lesiones y el cansancio es nuestro fiel compañero, pueda uno olvidarse lo que para nosotros significa el baloncesto. Para que esto no ocurra y para recordar por qué amamos este deporte, os pongo un enlace a un video. Creo que os gustará, aunque se trate solo de un anuncio de ropa

http://vimeo.com/17658668

Para compensar, para no empañar mi imagen de hombre culto y sofisticado y para evitar críticas feministas, os pongo un enlace a una retrospectiva de Cindy Sherman del MoMA. No hace falta que lo veáis.

http://www.moma.org/interactives/exhibitions/2012/cindysherman/#/11/

En cuanto al siguiente partido: YO VOY.
Besos a todos

Evaristos dijo...

Javi y Pablo van.

Enzo Films dijo...

Fer va

leo dijo...

Leo va. Evaristos compromise.

leo dijo...

Gran cronica, gran video, por cierto. Se que michael estara viendonos desde arriha, lo cual me deja mas tranquilo dado su aficion por los menores,....

Chus dijo...

Yo sigo con el dedo fastidiado, lo mismo me paso al tercer tiempo pero entre que es temprano y que tengo que suspender a mis alumnos, no lo tengo mu claro.
Aupa evaristos¡¡

gran crónica, pena perderme el bailecito de los 5 evaristos.