Gloriosa tarde de sábado (la del Estu digo, porque la nuestra..)

Lo primero es lo primero, enhorabuena a los colegiales por mantener la categoría, la verdad es que al final la cosa ha terminado bien, Estudiantes ni baja ni se declara en bancarrota pero, de todos modos, como os gusta de sufrí, la verdad, a ver qué tal el próximo año. En cuanto a Los Evaristos, después de un buen partido perdido de paliza contra los buenos, un mal partido ganado contra los más flojos del grupo. Mismo sitio, misma hora que el sábado anterior, seis Evaristos esperando al otro equipo, porque al filo de la hora todavía no eran cinco, lo que aprovechamos para confraternizar con la árbitro, vieja conocida de los Evaristos más veteranos y chamartineros. Finalmente llegan los jóvenes y comienza el partido, cero a cero como todos, el problema es que parecía que se iba a quedar así hasta el final, pues ni ellos ni nosotros conseguíamos culminar un ataque, aunque ambos equipos estábamos defendiendo entre mal y muy mal. Como es lógico, al final consiguieron encestar ellos y a partir de entonces los Evaristos a remolque durante mucho rato. En la mente de todos dos pensamientos en franca esquizofrenia: que los chavales eran malos, que esto lo arreglamos y que el partido se va ganar sin problemas y, por otro, que nos conocemos, que estamos antontolinaos y esto lo palmamos seguro. Tras perder el primer cuarto -metimos solo cinco puntitos- en el segundo, ligeras mejoras, pero la cosa no se veía nada clara, aunque ya metimos once puntos y fuimos afinando la defensa. En la segunda mitad parece que nos organizamos un poco y, aunque seguimos un tanto atolondrados en ataque y fallamos un montón de tiros -yo el que más- la defensa mejoró -a destacar Andrés, que hubo un rato en el que le tenía que doler la mano de todos los tapones que puso- y fuimos aumentando la ventaja. Finalmente, una victoria poco lucida y oportunidad desperdiciada de hincharnos a meter puntos y no es que tengamos tantas como para permitirnos el lujo de dejarlas pasar. Mención especial a ese público entregado, los hermanos de Leo y Chus, además de los habituales Gus y Pau.
Un besazo a todos.
Aupa Evaristos.