viernes, 23 de octubre de 2009

Repartiendo ilusiones... (cronica con retraso).


Comienza otro año de ilusiones en la liga municipal y van 8 ó 9. Pero no de ilusiones nuestras, no, amigos no os confundáis, sino de los contrarios. Preguntenselo a los Arrakis nuestro último rival, que no ha ganado ningún partido en los últimos años y estuvo cerquita de hacerlo gracias a los Evaristos.
La cosa ya pintaba medio rara. Doce Evaristos en la rueda de calentamiento y uno que la metía para abajo (ese Cristobal nuevo fichaje), caras despejadas, las fichas a tiempo, todos con ganas de jugar, entrenamientos (ejem) previos en el verano, un rival que nunca había ganado a nadie...
En fin un clásico evaristico, que suele acabar pues como suelen acabar estas cosas, en una nueva e inexplicable derrota.
Empezamos bien (mas raro todavía), balones dentro, contrataques, defensa... Ya os digo todo como muy raro.
Pero no, la cosa no iba a quedar así, faltaba el mítico efecto evaristico, que nunca es el mismo por cierto. Esta vez fue nuestro carrusel de cambios, basados en: "primero salen los que han llegado primero, luego los que su apellido tenga mas de cuatro vocales, luego todos lo altos juntos, luego los que están al borde de la lipotimia, luego los que tengan hijos, luego volvemos al cinco inicial,...".
Así hasta que conseguimos acabar el primer cuarto perdiendo de 5 y segundo de 3. Los Arrakis no se lo podían creer, iban a ganar por primera vez en su historia, y nosotros lo sabíamos. La reacción evaristica habitual en estos casos, es recurrir al histerismo deportivo: tiros imposibles, pases mas imposibles, entradas imposibles (de fallar), defensas 3-2 imposibles, e incluso voces de "defendamos al hombre" (pobre jacobo que inocente).
Se mascaba la tragedia, pero no, ¡los pueblos que olvidan su historia, están condenados a repetirla!, y el pueblo evaristico no olvida su historia.
Llegó el descanso, nos atamos las zapatillas, nos tatuamos unos lágrimas en la cara (este año se lleva el rollo mara salvatrucha), miramos a los ojos a los minievaristos que estaban en la banda, y nos dijimos no se merecen esto, nuestras hijas no se merecen esto. Tenemos que ganar. Y apoyados por el numeroso publico, que ondeaba estandartes y banderas, remontamos un partido, que la critica deportiva ha igualado a los duelos lakers-celtics de los 80.
En realidad lo que paso es que ellos no metieron ningún punto en el tercer cuarto y 5 ó 6 en el último (eran muy malos) y nosotros pues empezamos a jugar otra vez haciendo lo que sabemos. Y paso lo que ninguno pensabamos: una nueva victoria evaristica.
Después, lo de siempre, cervezas, análisis disparatados del partido, propuestas de nuevas camisetas y como siempre el del bar encantado con la caja.
EVARISTOS MANDAN.

2 comentarios:

juan dijo...

que gustazo tener de nuevo estas maravillosas crónicas, Gracias, son fieles y de partirse el ojal.
Alberto espero la tuya del partido de hoy día 24.
Aupa evaristos!!!!!

pablo dijo...

Gran foto da los pies de la peña. Muy artística. Impagable documento.