jueves, 17 de febrero de 2011

Todo llega

Sí, compañeros, por fin esta temporada un partido bien jugado por Evaristos de principio a fin. Y falta nos hacía, porque llevábamos una rachita que estaba empezando a dar miedo y no porque perdiéramos partidos que deberíamos haber ganado, sino porque no nos sentíamos a gusto ni siquiera en los pocos que ganábamos. Bueno, la verdad es que la cosa no era tan grave y sí que disfrutábamos jugando, pero un poco de dramatismo es conveniente para resaltar lo del sábado pasado. Jugábamos contra Yurtim, viejo conocido con el que forjamos una rara amistad en el primer partido que diputamos gracias a nuestras coincidencias respecto a la valoración (negativa, evidentemente) del árbitro de ese encuentro. Amistad que con el roce, en oposición a lo que dice el dicho, no se ha convertido en cariño sino en todo lo contrario. El precedente del partido anterior no era bueno, porque aunque entonces empezamos jugando bien y sacándoles una ventaja que superaba los diez puntos, en el último cuarto la dilapidamos con mucho arte para acabar perdiendo. Teniendo en cuenta esto, la cuestión era si íbamos a conseguir ponernos por delante y posteriormente perder o si íbamos a empezar perdiendo desde el principio. Pero algo había cambiado en los evaristos respecto a partidos anteriores, salimos con muchas ganas a la cancha, concentrados, defendiendo bien y atacando con sentido. Tanto, que acabamos el primer cuarto 18-8 a favor y el segundo con una ventaja de veinte puntos, algo así como 38-18. Pese a ello en todos los tiempos muertos y los descansos los comentarios eran los mismos, acordaros de la otra vez, nada de relajarse, etc, lo que no conseguía evitar que según pasaba el tiempo una sonrisa fuera creciendo en la cara de los evaristos. Y el final del partido se acercaba y Yurtim no lo hacía en el marcador y la cosa acabó en un 56-36 bastante apañado, que nos permitió irnos a las cervezas con un estupendo sabor de boca. Y como ocurre siempre que jugamos bien y ganamos, en el tercer tiempo ni media palabra dedicada no solo al desarrollo del partido sino ni siquiera al baloncesto en general. Esta claro que somos más de regodearnos en las derrotas que de glosar las victorias.
Bueno chavales, el próximo sábado jugamos contra los anteúltimos, magnífica oportunidad para ganar dos partidos seguidos o para aumentar nuestra leyenda de especialistas en palmar con equipos fáciles.
Besos a todos
P.S. Leo, esperamos con avidez el anexo de la crónica de hace dos sábados, donde se narra la intervención del SAMUR y la policía.

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